Este miércoles el Sydney Wanderers recibe el Shanghai SIPG en el Campbelltown Stadium en juego válido por la sexta ronda de la fase de grupos de la AFC Champions. En ese partido tendremos la confrontación de dos equipos que están en el grupo F, siendo que el mandante es el último colocado con 3 puntos y ya está eliminado, mientras que el visitante está en la 2ª posición con 12 puntos y ya está clasificado para la próxima fase. En el último enfrentamiento entre ambos hubo victoria del Shanghai SIPG por 5×1.
El Sydney Wanderers no viene nada bien en la AFC Champions y esto es dicho por su posición en la tabla de clasificación, siendo que entrará en campo ya eliminado. En Shangai SIPG sabe que la dificultad será grande, al final el momento vivido por el adversario es mucho mejor que el suyo, asà que si no quiere perder dentro de sus dominios necesitará tener una actuación excelente, además, errores no podrán ocurrir.
En los últimos dos partidos en los que el Sydney Wanderers hizo por la Champions asiática perdió ante el Urawa Red, fuera de casa, por 6×1 y perdió para el Seúl, en casa, por el marcador de 3×2. En el total de la competición el equipo ganó una y perdió cuatro veces, marcando siete veces y sufrió increÃbles veinte bolas en la red, lo que la deja con una media de 1,4 hechos y 4 goles sufridos por juego.
El Shanghai SIPG viene haciendo una gran campaña en la Liga de Campeones de Asia, pero acabó perdiendo el 100% de aprovechamiento, pero ya está garantizado en la próxima fase, siendo que ahora quiere puntuar para intentar asumir el liderazgo. En contra del Sydney Wanderers, si analizamos las estadÃsticas, es evidente que entra como gran favorito a vencer este juego y eso es lo que quiere, por lo que espera tener una gran actuación y sin errores, al final asà se acercarÃa al resultado positivo.
En los últimos dos partidos por la AFC Champions el Shanghai SIPG venció al Seoul, en casa, por 4×2 y acabó perdiendo para el Urawa Red, fuera de casa, por el marcador de 1×0. En el total de la competición el equipo ganó cuatro y perdió una vez, marcando trece veces y sufrió seis bolas en la red, lo que la deja con una media de 2,6 hechos y 1,2 goles sufridos por juego.